Inglaterra es un país con una gran variedad de monumentos mundialmente conocidos. El palacio de Windsor, el Stonehenge, el London Eye… son algunos de los lugares más visitados del país. Sin embargo, también hay rincones que no tienen tanta fama pero que vale la pena visitar. Algunos de estos son:
Beachy head
En la localidad de Eastbourne (Sussex) se encuentra el cabo de Beachy Head, uno de los acantilados más altos de Inglaterra. Este despeñadero cuenta con una altitud de 162 metros, lo que hace que tenga unas magníficas vistas. En Inglaterra, es conocido además de por sus vistas, por ser el lugar donde más suicidios se registran a lo largo del año: la media se encuentra en 20 muertes anuales.
Este acantilado ha sido escenario de algunas películas como Harry Potter y el Cáliz de Fuego y de algunas series como Black Mirror. Un lugar que, sin duda, deberías añadir si piensas viajar a Inglaterra.
La casa inclinada de Canterbury
Sir John Boys House es el nombre de uno de los atractivos turísticos de Canterbury. El edificio de madera, construido en el siglo XVII, se empezó a desplazar hacia un costado después de realizar unas reparaciones en la chimenea. Los dueños alertados de la pendiente que estaba cogiendo su casa decidieron hacer un esfuerzo por arreglarla. Sin embargo, consiguieron todo lo contrario, ya que la casa se desplazó más todavía. Los dueños decidieron aceptar la nueva estructura de la casa y adaptar las partes que lo precisaban, como por ejemplo la puerta, que la tuvieron que cortar para poder encajarla.
Mausoleo de St. Pancras Old Church
St Pancras Old Church es una de las iglesias más antiguas de Inglaterra. La parroquia, que se encuentra en el barrio londinense de Camden, se terminó de construir en el siglo XIX y es de origen medieval. Sus orígenes se remontan al siglo IV y se especula que puede ser más antigua que la catedral de San Pablo.
En las inmediaciones de la parroquia se encuentra el mausoleo de la familia Soane, que fue construido por el arquitecto John Soane para ser el lugar de descanso final de la familia en la iglesia. Años más tarde, Giles Gilber Scott se inspiró en su estructura para diseñar las cabinas de teléfono rojas, símbolo de la ciudad.
El pueblo con el nombre más raro
“Llanfairpwllgwyngyllgogerychwyrndrobwllllantysiliogogogoch” es el nombre de un pueblo pequeño de Inglaterra, situado en la Isla de Anglesey (Gales). Este topónimo está considerado como el tercero más largo del mundo y el más largo de Inglaterra. Este nombre de composición mixta, que mezcla el abecedario inglés y el galés, fue acordado por una votación del consejo del pueblo en 1860. El objetivo de poner un nombre tan largo fue el de convertirse en una atracción turística y después de más de 150 años, lo es.
El tiburón de Headington
En el tejado de una casa del barrio de Headington (Oxford) se encuentra una estatua de metal de un tiburón. El dueño de la casa, Bill Heine, decidió colocarlo ahí con motivo de protesta contra el uso de la energía nuclear, después de las bombas de Japón y del desastre de Chernobyl. La estatua, diseñada por John Bucley, está colocada estratégicamente para que simule el impacto de una bomba. Aunque las autoridades al principio intentaron quitar el monumento de la casa de Heine por falta de permisos, después de constituirse como atracción turística y símbolo contra la contaminación y energía nuclear, dejaron el monumento en el tejado.